PROPIEDADES:

Aceite de coco: Este aceite es hidratante, antifúngico y previene la descamación.

Aceite de almendras: Este aceite es antiinflamatorio, humectante y fortalece mucho las fibras capilares.

Aceite de argán; actúa como hidratante en el cuero cabelludo para combatir la caspa y la resequedad de este. Promueve el crecimiento del cabello sano y fuerte, se usa para tratar puntas abiertas.

Aceite de Ricino; Regenera las puntas abiertas, hidrata, previene el debilitamiento y la caída del cabello, aporta cuerpo y evita infecciones en el cuero cabelludo.

Manteca de Cacao; hidrata, evita la caída del cabello debido a la rotura, fortalece el cabello, agrega volumen y fuerza, repone los aceites perdidos debido a los procesos químicos, repara los filamentos del cabello dañado.

Oleato de Bambú, contiene un alto contenido de sílice que lo hace excelente para fortalecer y promover el crecimiento del cabello, ayuda a adsorber todos los nutrientes que estén en el shampoo. evita la pérdida o caída de este, así como su envejecimiento mediante la estimulación metabólica de las células.

Oleato de lavanda: ayuda a regular la producción de sebo y sellar la humedad.

Aceite de Aguaje: es ideal para el tratamiento de los capilares que necesitan hidratación, además de controlar el frizz y los protege de la acción de los rayos ultravioletas. 

Arcilla Blanca: también llamada caolín. Este tipo de arcilla ayuda a limpiar en profundidad, elimina las toxinas y para regenerar. Es una arcilla muy suave adecuada para pieles sensibles y secas. Suaviza, exfolia y purifica, absorbe las impurezas, por los que es ideal si tu pelo se engrasa con facilidad.

Aceite de Acai; Repara el cabello maltratado, disminuye el frizz, aporta brillo, suavidad y nutrición, previene la caída y mejora el crecimiento capilar; además, protege el cabello teñido.

Shikakai; Es capaz de estimular el crecimiento capilar, Previene la formación de caspa, Otorga suavidad y brillo.

Aceite de árbol de té: Este aceite regula la actividad de las glándulas sebáceas y es el mejor antifúngico y antibacteriano natural.

Aceite de menta; tiene propiedades calmantes, antibacteriano, antimicótico.

Vitamina E; funciona principalmente como antioxidante, lo que significa que ayuda a proteger las células del daño causado por los radicales libres.

MODO DE USO:

1. Humedecer la barra con agua fría o tibia.
2. Frotar en la palma de la mano o en el cabello hasta formar espuma.
3. Frotar desde el cuero cabelludo a puntas.
4. Enjuagar con abundante agua.

PRECAUCIONES: evitar el contacto con los ojos, no ingerir, mantener alejado de los niños, USO EXTERNO.